Dirección estratégica en empresas de Familia
¿Se puede dirigir una Empresa de Familia estratégicamente? Las empresas de familia presentan una serie de particularidades que vamos a analizar para responder esta pregunta. Para comenzar intentaremos definir los dos conceptos que integran el planteo que titula este artículo. En primer lugar, qué es una Empresa de Familia, y en segundo término, de qué se trata o qué es la Dirección Estratégica. Una Empresa de Familia es aquella en la que una familia controla el capital de una empresa y puede ejercer en forma directa o indirecta su dirección “con la intención de dar” continuidad a la empresa por medio de la sucesión familiar. La Dirección Estratégica es un sistema de dirección que se caracteriza por su capacidad para identificar rápidamente los cambios, implementar inmediatamente soluciones y hacer de la empresa una organización flexible para aplicar las estrategias necesarias.
El modelo de Dirección Estratégica se compone básicamente de cuatro etapas:
- Análisis Situacional (Análisis Interno y Externo)
- Formulación de la Estrategia (Corporativa, de Unidad de Negocios y Funcional)
- Aplicación de la Estrategia (Liderazgo, Motivación, Movilización de los RRHH)
- Controlar sus Resultados
Cuando nos referimos a una estrategia, hablamos de la formulación de metas y objetivos a lo largo del tiempo (Largo Plazo), a la aplicación de cursos de acción y a la asignación de los recursos humanos y materiales para poder cumplir con los objetivos trazados. En todas las empresas, y en las de familia por sus características particulares, para aplicar dirección estratégica es esencial quién o quienes son los que fijan las metas y objetivos para obtener lo que toda empresa necesita: lograr ventaja competitiva que pueda permanecer en el tiempo. Es muy importante la distribución y delimitación de funciones entre propietarios, directivos y empleados.
En general, en una empresa familiar de primera generación, el fundador por sus características de emprendedor, cumple con las tres funciones de propiedad, dirección y trabajo. En esta etapa se puede dirigir estratégicamente una empresa familiar, el problema es que, generalmente, el fundador no es consiente de la necesidad de dirigir estratégicamente o está convencido de que tiene todo bajo control y trata de reemplazar un modelo estratégico con su intuición y su conocimiento del negocio.
Ahora bien, ¿qué pasará cuando llegue el momento de la sucesión (segunda generación)? La sociedad conformada por los hermanos será la encargada de sustituir la dirección empresaria del fundador por un órgano colegiado, en la mayoría de los casos, integrado por los sucesores. Éste órgano será quien tenga que dirigir estratégicamente la Empresa, para lo cual, los sucesores deberán aceptar, comprender y redefinir, si es preciso, la cultura de la organización. En este punto deberán si no lo saben, delegar a profesionales las tareas del análisis estratégico, formulación de estrategias, rediseño de la organización, aplicación de las estrategias y controlarlas. En esta etapa, se presentan con frecuencia conflictos de roles entre propietarios, directivos, familiares, todo suele ser muy confuso.
En la segunda generación es difícil encontrar una clara delimitación de funciones, que la empresa tenga órganos de gobierno con funciones claras y que exista una junta de familia, consejo de familia y protocolo de familia, que hagan viable la “Dirección Estratégica”. En realidad, se puede aplicar este tipo de sistema de dirección pero es muy difícil por la complejidad de las relaciones interpersonales. Si la empresa, a pesar de las contrariedades que ocurren en la segunda generación, logra salir victoriosa y pasar a la tercera generación y, debido a que en esta etapa la dimensión de la familia, la complejidad de las relaciones familiares y la impostergable profesionalización de la dirección es imprescindible, se suele tomar la decisión que venían postergando para garantizar la subsistencia de la empresa.
Entonces, se realiza la delimitación de funciones entre propietarios, directivos y familiares, y con directivos profesionales (sean estos familiares o no) se busca aplicar Modelo Estratégico. El Consejo de Familia es el que debe decidir la presencia y el modo de pertenecer de la familia en el ente, la estrategia de la familia con la empresa y la misión de esta última, la cultura de la organización. Elegirá y controlará, asimismo, al equipo directivo y delegará en este último la implementación del Modelo Estratégico. Para concluir, podemos responder a la pregunta inicial diciendo que tanto en primera, segunda o tercera generación, podemos aplicar el Modelo Estratégico. Las empresas que lo han hecho pudieron sobrevivir en mejores condiciones a las crisis y lograron ventaja competitiva respecto de sus adversarios.
Dr. Pablo M. Cogliati